(Prensa Pasos Previos) El pasado 8 de Julio ingresó en el Concejo Deliberante de nuestra
ciudad un proyecto de ordenanza que propone
la creación de un Programa Municipal de Gestión Menstrual. El mismo fue
presentado por la concejal Agustina Lombide y surgió a partir del intercambio
con concejales de otros distritos interesados y preocupados por esta
problemática.
A su vez, esta iniciativa se desprende de una campaña a nivel
nacional denominada #Menstruacción, impulsada por la ONG “Economía Femini(s)ta” el 8 de marzo de 2017.
POLÍTICA PÚBLICA PARA LAS MUJERES
Según la Concejal Lombide “la intención de la campaña es visibilizar que
el acceso a la gestión menstrual es un factor de desigualdad, que las
concepciones estigmatizantes de la menstruación generan que sea una desventaja
concreta porque no se garantiza el acceso a productos. Por lo tanto, este tema
debe estar presente en la agenda para el avance de nuestros derechos y que se
conviertan efectivamente en políticas públicas”
CIFRAS EN EL PAÍS
En Argentina, hasta el momento se presentaron 16 proyectos de ley de
alcance nacional, provincial y local, en el marco de esta campaña que basa su reclamo
básicamente en dos aspectos: la distribución gratuita de métodos de
gestión menstrual en escuelas, hospitales, instituciones de asistencia social y
otros espacios comunitarios; y por otro lado, la eliminación del IVA a los productos
menstruales. Como un ejemplo en esta línea, en marzo de este año,
el municipio de Morón aprobó una ordenanza municipal para asegurar la provisión
gratuita de productos de gestión menstrual, creando un antecedente único en
nuestro país.El
28 de mayo, Día Mundial de la Higiene Menstrual, la ciudad de Santa Fe también
aprobó una ordenanza para la provisión gratuita, siendo la primera capital
provincial de nuestro país en contemplar este derecho.
DATOS QUE AVALAN LA PROPUESTA
Los fundamentos de esta campaña surgen de datos concretos y relevados
por la ONG mencionada: en Argentina, la brecha salarial promedio es
del 27,7%, pero más del 38% de las asalariadas están en situación de
informalidad donde la brecha asciende al 37%. A su vez, la mitad de las mujeres
en nuestro país gana menos de $17.900 mensualmente y el costo estimado de
gestionar la menstruación en 2020 mediante la compra de toallitas y tampones es
de entre 2.900 y 3.800 pesos argentinos. Este gasto no es optativo ya que se
trata de una necesidad fisiológica que debe ser atendida.
PONER EN AGENDA LA IGUALDAD
“Cuando se habla de pobreza menstrual, ese término
se refiere a la imposibilidad de acceder a productos sanitarios; educación
sobre gestión menstrual; inodoros o instalaciones para lavarse las manos y/o
gestión de residuos. La falta de
acceso a servicios básicos nos lleva a pensar en todos los riesgos para la
salud que desencadena la imposibilidad de garantizar este derecho. No
podemos pensar en igualdad de género siendo testigos de una desigualdad
sistémica ignorada en la agenda pública”, aseguró Agustina Lombide y agregó que
“por eso este proyecto pretende avanzar con soluciones concretas para que no se
le niegue a ninguna persona el derecho a gestionar su ciclo menstrual de forma
digna y saludable”.