La comunión de los divorciados vueltos a casar divide a los obispos en el tramo final del Sínodo
La posibilidad de que los divorciados vueltos a casar reciban la
comunión mantiene posturas diversas entre los más de 300 participantes
del Sínodo de Obispos que culminará el próximo sábado en el Vaticano,
aunque con consenso en no "centrar" el debate sinodal en ese punto.
Los 13 "círculos menores" en los que se dividieron los obispos y
participantes de la XIV Asamblea General Ordinaria mostraron opiniones
que van desde "mantener la disciplina actual" hasta "tratar al tema de
una manera distinta" incluida la de "plantear un movimiento generoso
quitando del camino muchas trabas" que persisten hoy.
"No basta con hablar de caminos de misericordia y cercanía, sino que
debe llegarse a propuestas concretas porque, si no, nos vamos a quedar
en palabras bonitas pero vacías", planteó el Círculo Ibérico "A", en el
que participan los argentinos Víctor Manuel Fernández y Marcela Mazzini.
"Quizá la ´descentralización´ de la que habló el Santo Padre en la
conmemoración de los 50 años del Sínodo puede ayudar a hacer más ágil y
cercana la solución, evitando, incluso, muchas formas de discriminación
que hay en la Iglesia sobre estas personas", añadió este grupo.
"Sin duda, tenemos que plantear un movimiento generoso quitando del
camino muchas trabas para que los divorciados vueltos a casar puedan
participar más ampliamente en la vida de la Iglesia: no pueden ser
padrinos, no pueden ser catequistas, no pueden dar clases de religión.
Tenemos que dar muestras de que hemos escuchado el "grito" de tanta
gente que sufren y gritan pidiendo participar lo más plenamente posible
en la vida de la Iglesia", pidió el Círculo, uno de los más favorables
al cambio de postura vaticana.
En la otra orilla, el Círculo Gálico "B", que agrupa a participantes
francoparlantes, plantea "mantener la disciplina actual", reconociendo
posturas sobre que la situación de los divorciados vueltos a casar "son
situaciones no conformes a lo que la Iglesia demanda".
Tras al discusión en 13 "círculos menores", los más de 300 participantes
elevarán sus propuestas de conclusiones a una comisión de diez miembros
que se encargará de presentar, el sábado, el texto final del Sínodo que
será puesto a votación entre los 270 padres sinodales con derecho a
voto y luego entregado al papa Francisco para su eventual publicación
como documento papal o exhortación apostólica