Este último
no se encontraba en la localidad por lo cual el o los ladrones aprovecharon su
ausencia para alzarse con un
microondas, una radio y una campera, revolvieron
muebles, cajones y como había muchas cosas aún no sabe el dueño que más se
pueden haber llevado. Intentaron forzar otras ventanas que no lo lograron y a
modo de “regalito” de la visita defecaron n el porche de la vivienda.
En cuanto al
Centro de Día, de allí se llevaron una garrafa y comida.
Estos no son casos aislados en esa comunidad ya que no hace muchos días dábamos cuentas de otros hechos de características similares, por lo que en esa pequeña localidad rural del norte del partido de casares, la tranquilidad es algo que ya se perdió hace tiempo y la gente no se anima a dejar sus casas solas por miedo a que les suceda lo mismo. La inseguridad es para "todos y todas"- (Casaresonline)